
Alemania recauda aproximadamente mil millones de euros anuales en impuestos sobre productos que contienen café tostado. Estos importantes ingresos provienen de dos fuentes diferentes:
1 pulgada de café tostado
¿Lo sabías? El café importado ya tostado está sujeto a un arancel de importación para proteger la industria procesadora nacional. Solo la importación de café sin procesar está exenta. El café crudo procedente de todos los países de origen está exento de impuestos.
Sin embargo, para el café tostado y otros productos derivados del café, se aplican aranceles de entre el 7,5% y el 9%, un instrumento que ha protegido con éxito el mercado europeo del café durante siglos.
Primero En 2007, se eliminó el arancel europeo del 30% a la importación de café tostado procedente de Etiopía y otros países en desarrollo. Esto les brindó, por primera vez, la oportunidad de mantener toda la cadena de valor de su producto dentro de sus fronteras.
Un ejemplo exitoso del llamado Comercio Justo Directo es la marca Solino; lea más sobre ella.
2. Impuesto al café en Alemania
El Estado alemán también se beneficia: Alemania es uno de los pocos países de la UE que aún aplica un impuesto al café. Para las ventas dentro de Alemania, se añade un impuesto adicional.
- 2,19 euros por kilogramo de café tostado y
- 4,78 euros por kilogramo de café instantáneo
pendiente.

